Corpulento, malcarado y renqueante. Así era el hombre que aquella mañana se detuvo ante el Apfelchen , el pequeño velero de Blancanieves. Odbal estaba tumbado en la bañera de popa, sobre la piel que unos días antes había encontrado al borde de la ría, orgulloso como un general con un trofeo de guerra. Mientras tanto, Blancanieves repasaba los cabos y ni siquiera notó la presencia de aquel tipo que se había detenido, casi sin respiración, delante de su perro. - ¿Cuánto? – preguntó – ¿Cuánto quiere por eso? Un resoplido de fastidio escapó de los pulmones de ella al verse obligada a levantar la cabeza para atender a la impertinente pregunta. Le costó unos segundos asimilar la escena: el viejo marinero borracho señalando al animal; Odbal devolviéndole la mirada fijamente, enseñando los dientes… y aquella estúpida cuestión flotando en el aire salobre. Tan estúpida y molesta como el graznido de las gaviotas, pensó. - No está a la venta. Su perro era sagrado, habían pasado po
Patrick debería haberle dicho:
ResponderEliminarPues tú subelas Silvie, y a quien no le guste que no mire, que no está hecha la miel para la boca del asno.
Me encanta el color rosa tan fuerte de la peluca y le queda super bien, aunque la púrpura tampoco le sentaba nada mal.
La sesión muy bonita y primaveral. Silvie es super adorable y monosa y me gusta ver que también es aficionada a este hobby ^^
Pero si es que más adorable ya no se puede ser ni queriendo... La peque tiene que ser realmente peque!!!
ResponderEliminarMe encanta como queda la muñequita con la muñequita jijiji Con la cámara y con todo el equipo, vamos. Se le de mejor que a nadie!!!
La FH realidad total en el 99.9% de los casos xDDD
Coincido con Nicte: Silvie, pasa de todo y que les den a esas meretrices!!
Me pierde su lengua viperina jajaja
Es verdad que el tono de pelo, así tan fuerte, le sienta genial... Y la chiquitina es puro amor, me encanta la carita que tiene!!