Confío en ti para esto
- Una mujer alta y delgada como una modelo vino a por mí a la estación. me condujo hasta el hotel y luego de dejar mis cosas me llevó a aquella horrible nave. Era medio piscifactoría, medio matadero, medio piscina municipal de barrio pobre...
Volker: ¡Herbert!
Herbert: ¿Volker?
- No había reconocido su voz en la llamada, pero al verle supe al instante quién era. Volker Riedel, habíamos sido compañeros en el instituto. Era uno de esos chavales que no son ni amigos ni enemigos… de manera que no había vuelto a saber de él desde que pasé a la Universidad.
Volker: ¿Qué tal el viaje? ¿Vienes muy cansado? Apuesto a que sí… pero no podías resistirte, tenías que verla. ¿Verdad? Claro… es alucinante, en serio. Vas a flipar, sígueme.
- Habla demasiado.
Volker: Mírala. Está ahí.
- Me asomé con el corazón en un puño, la respiración contenida. Lo que encontré allí abajo no era en absoluto lo que había imaginado. Había una red basta, y en su interior se encontraba una criatura pequeña y magullada, enroscada sobre sí misma. Estaba temblando.
Herbert: ¿Pero qué…?
Volker: ¡Eh, no tan rápido, Doc! Ten cuidado. Si está así es por seguridad, ¿sabes? Es muy agresiva. Al principio da un poco de lástima pero luego te acostumbras.
Herbert: Vaya…
Volker: Cuando llegué, los pescadores estos estaban acojonados. No he tenido que insistir mucho para que me la vendan. Seguro que si hubiese apretado un poco más habrían acabado regalándomela, jaja.
Herbert: ¿Venderla?
Volker: Sí. Estos cabrones no saben lo que tienen aquí. Oro puro… les he puesto cinco mil en la mesa y no se lo han pensado dos veces.
Herbert: Pero… pero no puedes comprar a una persona.
Volker: ¿Persona? ¿Qué persona? ¿Esto es una persona? Herbert, por favor… ¡es una alimaña! No sé cómo decirlo… es un fenómeno de feria.
Herbert: Estamos hablando de una criatura viva…
Volker: ¡Claro! ¿Quién iba a quererla muerta? No, joder. Es como en los zoos… a la gente le gusta ver bichos vivos. Llaman la atención, se mueven, hacen cosas, les gustan a los niños… ¿en cambio cuántas visitas familiares recibe el Museo de Ciencias? Ja, ja, ja, seguro que ahí vas tú solo.
- Ja-ja.
Volker: ¿Qué querías hacer con ella si no?
Herbert: Lo suyo para hacer un estudio de este tipo es capturar a la criatura, tomar todos los datos posibles y luego devolverla a su hábitat. Quizás sería conveniente ponerle un localizador para un perfil etológico…
Volker: Oh, sí, para encontrar más sirenitas. Eso sería la caña… pero no me interesa que aparezcan más sirenas. No por el momento. Ahora es la única y es mía, ¡tenemos la exclusiva! Desde luego que no quiero que cada zoo-acuario tenga la suya…
- ¿Zoo-acuario?
Volker: … vendrán de todas partes del mundo para verla, ¡ya lo verás!
- No entiendo nada.
Herbert: ¿Qué es lo que quieres de mí?
Volker: ¿Em?
Herbert: Sí… ¿qué puedo hacer yo? ¿O qué quieres que haga?
Volker: Quiero que la estudies, Doc. Y quiero que la cuides. Necesito saber cosas… cosas como qué come o qué edad tiene.
Herbert: Entiendo…
- Me da vueltas todo.
Volker: También sería genial descubrir qué sabe hacer… si es que sabe hacer algo. Ya sabes: saltar, jugar con un aro, cantar…
- Dios.
Volker: Confío en ti para esto. No me falles, ¿eh?
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Herbert: IOS Hiro + DT15
Volker: SOOM Spinel
Sirena: PD Roseanne + Aqua body
Tus fotohistorias me parecen una pasada, pero ésta ya es que se sale xD Te ha quedado genial, y la historia en sí engancha un montón. ¡Espero que la continúes pronto! ♥
ResponderEliminarSon increibles las foto historias!!! me encantan! No las subes al foro? me encanta!
ResponderEliminarEstoy pensando en alguna aplicación para poder leer estas foto historias con el movil, pero todavía está en fase de pruebas, lo que pasa es que necesitaría que estuvieran todas en el foro xDDDD ya te comentaré si esto sigue adelante.